El empleado judicial y ciclista asesinado ayer en la ciudad bonaerense de Pergamino murió de un único disparo que le entró por la espalda y le perforó uno de los pulmones, según confirmó la autopsia, mientras que los investigadores intentan identificar a al menos dos autores de lo que creen que fue un “homicidio en ocasión de robo”, informó hoy el fiscal de la causa.
El fiscal Horacio Oldani, quien subroga la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Pergamino, a cargo de la investigación por el homicidio Fernando Daniel ‘Poroto’ Liguori (52), indicó esta mañana a Télam que “anoche se realizó la correspondiente operación de autopsia que confirmó que la víctima murió de un único disparo”.
Oldani señaló que los forenses le informaron que el proyectil ingresó por la zona de la espalda, atravesó uno de los pulmones y salió por la parte frontal del tórax, y que esa lesión causó un shock hipovolémico que le ocasionó a Liguori la muerte.
Consultado por el móvil del crimen, Oldani afirmó que “todo indica que se trató de un homicidio en ocasión de robo”.
Se cree que los asesinos pudieron tener la intención de robarle a la víctima y a su mujer las bicicletas y las pertenencias que llevaban consigo.
El fiscal explicó que se está trabajando desde ayer en identificar a las “al menos dos personas de sexo masculino que cometieron el hecho”.
La única testigo fue la propia esposa de la víctima, quien dijo que los asesinos actuaron “a pie” y que no vio “ningún vehículo” en el que hayan arribado o escapado, según aclaró el funcionario judicial.
“El sitio donde ocurrió el asesinato es una zona rural que hace dificultoso el hallazgo de más testigos o de videos que ayuden en la investigación. La cámara más cercana está a 1.500 metros”, contó Oldani.
Alejandro, el primer testigo que paró en el lugar cuando Liguori ya había sido baleado y se esperaba el arribo de una ambulancia del SAME, aseguró hoy al canal C5N que se encontró “con un cuadro muy fuerte”.
“El chico ya estaba fallecido sobre este camino, su esposa estaba sobre él queriendo reanimarlo y ya el SAME estaba a un minuto de llegar. La esposa le decía ‘despertate, despertate’ y en ningún momento este muchacho respondió. Lo mataron a sangre fría”, dijo.
El hombre explicó que cuando llegaron los médicos, la patrulla rural y los peritos, ellos se apartaron y allí mujer de Liguori llegó a contar que “desde los arbustos salieron las personas, les pidieron las bicicletas y los corrieron hasta que empezaron los disparos”.
“Él le dijo en ese momento ‘apuremos el tranco de la bicicleta para que no nos alcancen’ y terminó acá. Ella contó que fueron más de cinco disparos más o menos”, afirmó Alejandro en relación a la cantidad de tiros que la viuda llegó a escuchar que les dispararon.
Agregó que la víctima llegó a “pedalear 150 o 200 metros y cayó sobre una vía que es la que va a San Nicolás”.
El testigo afirmó que “fue un intento de robo”, contó que Liguori y su mujer “hace poco tiempo habían comprado dos bicicletas nuevas de mountain bike” y señaló que por el valor de esos rodados “los deben haber esperado” para robarles.
Por último, explicó que el camino rural donde ocurrió el hecho “es la vieja ruta 8” y “un camino super transitado” donde después del trabajo “familias enteras salen a caminar, a bicicletear, a tomar mate o a aprender a manejar”.
El hecho ocurrió alrededor de las 15.30 de ayer en un camino de tierra paralelo a la ruta nacional 8 que conecta las localidades de Pergamino y Fontezuela, en el norte de la provincia de Buenos Aires, donde la víctima, iba en bicicleta junto a su pareja.
Ambos fueron asaltados por delincuentes que salieron detrás de unos pastizales, uno de los cuales efectuó disparos de arma de fuego y el hombre recibió un balazo en la espalda que le causó la muerte casi en el acto.
La mujer llamó al 911 y personal médico que llegó en una ambulancia constató que la víctima había fallecido a raíz de las lesiones sufridas.
En el caso trabajan con el fiscal efectivos del Comando de Prevención Rural y detectives de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) Pergamino.
Liguori trabajaba en el Juzgado de Familia de la ciudad de Pergamino, por lo que la Comisión Directiva Departamental Pergamino-Colón de la Asociación Judicial Bonaerense emitió un comunicado en el que expresaron su “inmensa conmoción por lo sucedido” y se solidarizaron con su familia, compañeros de trabajo y seres queridos.