El Ministerio de Defensa de Reino Unido consideró hoy que el Ejército ruso
planea un cambio de estrategia para iniciar una guerra de “desgaste” en
Ucrania que llevará a “un empeoramiento de la crisis humanitaria”, mientras
que el premier británico, Boris Johnson, advirtió que una victoria rusa en
ese país significaría el principio de una “nueva era de intimidación” de
Moscú hacia otras naciones vecinas.
“Rusia se vio obligada a cambiar su aproximación operativa y ahora persigue
una estrategia de desgaste”, indicó el Ministerio de Defensa británico en
su evaluación de la situación, subida a su cuenta de Twitter.
Según su análisis, el Kremlin “ha sido incapaz de alcanzar su objetivo
original” de conquistar el país en cuestión de días, al verse “sorprendida
por la escala y ferocidad de la resistencia ucraniana”.
Es por ello, entiende el Ministerio, que el presidente de Rusia, Vladimir
Putin, reforzó todavía más en los últimos días “su control sobre los medios
nacionales de comunicación”, consignó la agencia de noticias Europa Press.
“El Kremlin está intentando controlar la narrativa, distraer la atención de
sus problemas operativos y ocultar a la población el elevado número de
bajas rusas”, concluyó la evaluación del gobierno británico.
Poco después, el premier británico alertó sobre los riesgos de una eventual
victoria rusa en Ucrania.
“Significará el comienzo de una nueva era de intimidación en Europa del
Este, desde el Báltico hasta el Mar Negro”, declaró Johnson en el discurso
inicial de la Conferencia de Primavera del partido conservador británico en
Blackpool.
El primer ministro consideró que es poco probable que un Putin victorioso
se detenga en Ucrania y dijo que este éxito podría tener repercusiones para
Georgia y Moldavia, y que su triunfo daría “luz verde para los autócratas
en todas partes”.
“Es un momento de elegir entre la libertad y la opresión”, sentenció, según
consignó la cadena Sky News.
Horas antes, la ministra de Relaciones Exteriores británica, Liz Truss,
declaró que temía que las negociaciones para lograr una tregua entre Rusia
y Ucrania solo sean una “cortina de humo” usada por el Kremlin para
intensificar su ofensiva.
En una entrevista con el diario The Times, Truss dijo que era “muy
escéptica” sobre estas negociaciones y consideró que Rusia podría estar
usándolas “para distraer”.
“Su invasión no ocurre como habían previsto. No vemos ninguna retirada
importante de tropas rusas ni ninguna propuesta seria sobre la mesa”, dijo
en declaraciones citadas por la agencia de noticias AFP.
“Los rusos mintieron y siguen mintiendo. Temo que la negociación solo sea
un nuevo intento de distraer y crear una cortina de humo”, agregó.
La ministra estimó que si “un país se toma en serio las negociaciones no
bombardea civiles ciegamente ese mismo día”.
Ucranianos y rusos han celebrado varias reuniones desde el 24 de febrero,
día en que comenzó la invasión comandada por el Kremlin. Esta semana las
negociaciones fueron por videoconferencia.
“Es tiempo de reunirnos. Es tiempo de discutir. Es tiempo de restaurar la
integridad territorial y la justicia para Ucrania”, pidió en las últimas
horas el presidente ucraniano Volodimir Zelenski en un video subido a la
red social Facebook.