La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner consideró hoy a la “economía binomentaria” como la responsable del problema estructural del país, al hablar en un acto en El Calafate..
“La economía bimonetaria une a todas las crisis de la Argentina: la escasez de dólares, la corrida cambiaria, las devaluaciones y las inflaciones”, dijo la vicepresidenta al inaugurar esta tarde el Cine Teatro Municipal de esa ciudad santacruceña.
Fernández de Kirchner sostuvo que una “corrida cambiaria” suele producirse en Argentina cuando los sectores de mayor poder “no pueden obligarte a devaluar; entonces provocan la brecha”.
“La brecha se produce siempre cuando hay regulación cambiaria, cuando no se los deja acceder libremente a los dólares que se le da la gana en el mercado único y libre de cambios”, amplió.
Según la titular del Senado, si no los dejan “sacar los dólares que quieren del país se comportan como adictos; si no pueden por las buenas, lo hacen por las malas, y estallan la economía del país”.
Por ello, consideró que “el problema estructural de la economía argentina es la economía bimonetaria, que no es únicamente aquella restricción externa por los dólares que necesita la industria para producir y que provee el campo”.
“A esa restricción externa sobre la necesidad de dólares que demanda la industria se sumó la economía bimonetaria que es algo más, son los argentinos decidiendo que quieren tener dólares para ahorrar o para comprar un inmueble porque no lo consiguen en pesos”, aseguró.
Por ello, se preguntó “si el problema era el intervencionismo y dirigismo kirchnerista de los 12 años y medio (de las anteriores gestiones de ese espacio), qué pasó en los cuatro años en los que eliminaron los derechos de exportación del agro, la regulación de la cuenta capital y los capitales entraban y salían libremente (durante el Gobierno de Mauricio Macri), donde se le concedió al sector privado todas y cada una de las demandas que planteaban”.
“Tampoco fue bien”, afirmó y planteó que “es hora que nadie se sienta dueño de la verdad o de sentir que tiene la vaca atada”.